Un grupo de expertos del Instituto de Investigación del Hospital de Ottawa, en Canadá encontró que el consumo de marihuana durante el embarazo podría aumentar el riesgo de que un niño desarrolle autismo.
“Las mujeres que consumieron marihuana durante el embarazo tenían 1.5 veces más de probabilidad de tener un niño con autismo.
“Estos no son hallazgos tranquilizadores. Desaconsejamos enérgicamente el uso de cannabis durante el embarazo y la lactancia”, mencionó Darine El-Chaâr, doctora, especialista en medicina materno fetal y autora del estudio.
De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), en estudios ya realizados anteriormente se ha comprobado que el ingerir marihuana durante la gestación provoca en los recién nacidos bajo peso, impulsividad, hiperactividad, problemas de atención, entre otras complicaciones cognitivas y de conducta en los menores.
E incluso se ha comprobado que las mujeres que realizan estas prácticas tienen un riesgo 2.3 veces mayor de que su bebé nazca muerto.
“Basada en eso, no estoy demasiado sorprendida por estos hallazgos. El desarrollo del cerebro del feto ocurre a lo largo de todas las edades de la gestación”, agregó la también investigadora clínica del Instituto de Investigación del Hospital de Ottawa.
Para realizar dicho estudio, los investigadores analizaron todos los nacimientos de Ontario, Canadá, ocurridos entre el 2007 y 2012, años antes de que el uso recreativo de la marihuana fuera legalizado en aquel país en 2017.
En total surgieron medio millón de mujeres que dieron a luz en ese lapso de tiempo, pero los expertos redujeron el estudio a solo 2 mil 200 mujeres quienes confesaron que consumieron marihuana durante su embarazo, sin mezclarlo con tabaco, alcohol u opiáceos.
El consumo de este producto se realizó en su mayoría durante los primeros tres meses del embarazo, y su uso fue más recreativo que médico; sin embargo, los especialistas aseguraron que el primer trimestre es uno de los periodos más sensibles para el desarrollo cerebral del feto, por lo tanto, podría ser susceptible al daño.
“Ayuda con diferentes condiciones que puedan tener o para las náuseas y los vómitos en el embarazo. Algunas personas (dijeron) que la usan para dormir o para reducir el estrés. Otras lo usan de forma recreativa; es sólo parte de su rutina.
“Se puede formular la hipótesis de que si hay receptores de cannabinoides y el cerebro del bebé está expuesto, puede tener un efecto en el desarrollo del cerebro”, dijo El-Chaâr.