Trece personas murieron en una estampida en una discoteca en Perú que fue allanada por la policía por violar las normas de confinamiento ordenadas para detener la propagación del coronavirus. Es la primera gran tragedia en medio de la pandemia, al menos en Latinoamérica, por la decisión de la gente a no seguir las restricciones impuestas.
El Ministerio del Interior informó que el suceso ocurrió en la discoteca Thomas en Lima, donde unas 120 personas se habían congregado en una fiesta la noche del sábado.
Las personas trataron de escapar a toda prisa por la única puerta que había en el segundo piso, lo que ocasionó una estampida en el estrecho espacio, dijeron autoridades.
Después de la estampida, la policía tuvo que abrir la puerta a la fuerza.
Franco Asensios, uno de los que estaba en la discoteca, relató a la emisora RPP que la policía llegó a eso de las 9 de la noche.
“Los tombos (policías) dijeron ‘bajen las mujeres’… la gente se alocó y comenzaron a bajar, y después dijeron que se estaban asfixiando la gente de adelante”, señaló.
Los agentes detuvieron a 23 personas. El jefe policial Orlando Velasco informó que los agentes no usaron armas de fuego ni gas lacrimógeno en el operativo.
No estaba claro aún quién organizó la actividad en esa discoteca y qué ha pasado con los propietarios del lugar.
Desde mediados de agosto los peruanos tienen prohibido reunirse, incluso en citas familiares, por un estado de emergencia que limita varias derechos constitucionales para evitar contagios. Las autoridades también han prohibido salir los domingos debido a un alza en las infecciones.
Los clubes nocturnos tienen prohibido funcionar desde marzo en Perú debido a la pandemia. Perú empezó a levantar algunas restricciones el 30 de junio a fin de estimular la economía, y el número de infecciones reportadas diarias se ha duplicado en semanas recientes, a más de nueve mil.
Perú ha reportado unos 27 mil 500 fallecimientos a causa del coronavirus.